Curiosidades del mundo
Publicado en15/11/2016
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Últimamente nos hemos despertado con la noticia de que un fuerte terremoto ha sacudido en alguna parte del mundo.
Muchas de estas zonas sísmicas están en zonas de plantación de viñedo, California, Chile, Italia y ahora Nueva Zelanda.
En California, por ejemplo, el 24 de Agosto de 2014 hubo un terremoto de 6 grados en la escala Richter que provocó grandes destrozos en muchas bodegas de los Valles de Napa y Sonoma justo antes de la vendimia. El mayor impacto fue en las naves de barricas, que con los temblores acabaron cediendo y cayéndose todas las barricas, con la posterior pérdida del vino que reposaba dentro de ellas, y por supuesto en los botelleros, que cedieron y las bodegas de California lo describieron como “un mar de vino”. También, cada vez se oye más, que los científicos esperan un terremoto de gran magnitud en California en los próximos años.
En Chile, el 16 de Septiembre de 2015, hubo un terremoto en la zona de Coquimbo de 8,4 grados en la escala de Richter, que debido a su magnitud, se sintió en prácticaticamente todo el país hasta en la zona de Bio-Bio. Igualmente tanto barricas como botellas se cayeron en muchas bodegas chilenas y los destrozos fueron cuantiosos para el sector. Este desastre provocó que los bodegueros chilenos intercambiaran impresiones con los bodequeros californianos para prepararse para los terremotos futuros y minimizar las pérdidas en la bodega.
En Italia, casualidades de la vida, también el 24 de Agosto de este mismo año 2016, ha habido un terrible terremoto de 6,2 grados en la escala de Richter y que ha afectado a muchas bodegas del centro de Italia y en el que desgraciadamente han muerto muchas personas.
Y el más reciente ha sido el terremoto de 7,8 grados en la escala de Richter al noreste de la ciudad de Christchurch en la isla sur de Nueva Zelanda el pasado 13 de Noviembre de este año, afectando a zonas como Marlborough o Nelson y en la que igualmente ha habido un gran número de bodegas afectadas.
Todos estos destrozos han podido ser mayores si se hubiera producido un tsunami devastador tras los terremotos que por suerte no ocurrió.
Pero obviamente todos estos sucesos, hacen a las bodegas replantearse la forma en que sostienen las barricas, las jaulas de las botellas y la colocación y ubicación de los materiales de elaboración. Todas estas bodegas están en zonas de producción muy buenas, pero tremendamente expuestas a un terremoto devastador. Es por ello, y ya lo están haciendo, que es necesario que compartan información y soluciones de edificabilidad en las bodegas para evitar males mayores.”
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